R | Moxie, de Jennifer Mathieu

⭐⭐⭐⭐⭐

Moxie es sororidad y feminismo.

Todavía es pronto para afirmarlo, pero sin duda, Moxie ha sido el descubrimiento del año. Es un libro que había visto varias veces en ebiblio, la sinopsis pintaba bien e incluso me lo habían recomendado más de una vez. No obstante, no terminaba de decidirme a darle una oportunidad, siempre había otra historia que me apetecía más leer. No fue hasta que vi el tráiler de su adaptación cinematográfica y me entraran ganas de ver la película que me decidí a darle una oportunidad.

Moxie es genial. Moxie no tiene una gran trama, ni grandes personajes, pero lo que si tiene es un gran mensaje feminista entre sus páginas, una intención de poner sobre la mesa una realidad que todos conocemos y hacer que nos involucremos en ella. La historia de Jennifer Mathieu cuenta con una premisa muy sencilla; en esta historia seguimos a Vivian en su penúltimo año de instituto: un año lleno de grandes cambios, de ser valiente y de dar un paso al frente.

Empiezo hablando sobre Vivian. Ella es una chica que puede ser cualquiera de nosotras, que no le gusta ser el centro de atención, que quiere pasar inadvertida y no meterse en líos. Me he visto en ella en muchas ocasiones. De hecho, lo que más me gusta de Viv es que es una chica corriente sin un pasado ni una vivencia trascendental que hace que cambie su forma de ver el mundo de forma drástica. Ella está creciendo y eso hace que empiece a replantearse que siente al respecto de muchos comportamientos que ve en su día a día en el instituto, en su pueblo y que hacen que quiera hacer algo frente a ello, pero sin exponerse a ser señalada. De este deseo nace Moxie, de él nacen las chicas Moxie.

Con todo eso, no hay que olvidar a su madre; ella es todo un referente para su hija. Aunque ahora mismo pueda parecer la típica madre que evita meterse en problemas tiene un pasado de chica rebelde e inconformista que la llevaron a vivir fuera de su pueblo natal, a irse a conciertos de rock feministas con sus amigas y luchar por sus derechos cuando casi nadie lo hacía en ese momento. Todo eso también inspira mucho a Viv y en su creación de Moxie.

Pasando a hablar sobre el resto del elenco de personajes. Ellos están allí por un motivo, representan algo y la autora no lo esconde. Son una representación de diferentes puntos de vista: Lucy, Claudia, Mitchell, Seth y todos los demás están allí para mostrarnos otra perspectiva, ya sea buena o mala. Además, también vemos a personajes de diferentes edades y procedencias sociales. A pesar de estar narrado bajo el punto de vista de Vivian vemos un gran abanico de perspectivas.

Lucy es la más valiente, la que tiene la mentalidad más revolucionaria. Claudia es todo lo contrario, la más conservadora. Mitchell representa el perfil de chico que ha crecido en el lugar donde todo le es favorable, él es una estrella y por ello puede hacer lo que quiera sin represalias. Seth, el chico nuevo que viene de una ciudad más grande y con una mentalidad más abierta.

El marco en el que desarrolla la historia. La autora tiene como talón de fondo un pequeño pueblo muy tradicional y con costumbres muy conservadoras, por no llamarlo de otra manera, que refleja la realidad de más zonas de las que podemos llegar a pensar. Además, la vida de este pueblo gira en torno al equipo masculino de fútbol americano. En él, sus jugadores son tratados como leyendas, héroes y estrellas del rock y los partidos de la temporada son acontecimientos marcados en todos los calendarios, incluso en aquellos que no tienen hijos en edad de ir al instituto.

Lo que más me ha gustado es como la autora nos cuenta esta historia. Jennifer Mathieu se nos gana en los primeros capítulos con la presentación de Vivian también con la aparente sencillez y su narración ágil y dinámica. En las primeras páginas supe que me iba a encantar esta historia y así ha sido. Lo mejor es verla desarrollar el conflicto poco a poco, como a cada capítulo incrementa la tensión, la apuesta es más grande y se te empieza a poner la piel de gallina con cada respuesta de las chicas Moxie. Todo este incremento gradual, paso a paso la tensión aumenta y te lleva a una escena final donde no puedes evitar emocionarte, porque todas las semillas que la autora ha ido dejando a lo largo de la historia florecen a la vez y estallan de una forma preciosa.

Moxie es una historia de la que no esperaba nada, pero que terminó dándomelo todo. Lo importante no son la trama ni los personajes, sino el mensaje que quiere transmitir la autora. Me gusta mucho como todas las chicas terminan haciendo una piña frente aquellas actitudes que no ven bien. Amistad, sororidad y feminismo es lo que vais a encontrar en este libro.

Moxie, la película (próximamente)