Una historia de amor, pero sobre todo una historia de una familia.
Me apetecía muchísimo darle una oportunidad a esta historia, ya que, Mònica Linares es una compañera del club de lectura; fuimos siguiendo un poco como le iba el proceso de búsqueda de editorial, hasta que hemos podido tenerlo en las manos y leerlo.
En esta historia nos presenta a Teo y a Ona, abuela y nieta, quienes emprenden un viaje para rememorar el pasado, descubrir parte de la historia de juventud de Teo y sacar a la luz secretos que llevaban muchos años escondidos. Está contada a dos tiempos, por un lado, tenemos los capítulos dedicados a la historia de juventud de Teo y por el otro lado, en el presente seguimos el viaje de ellas dos, un viaje para recordar, pero también para aceptar y compartir aspectos del pasado.
Para empezar decir que me costó un poco entrar en la historia y se me hizo bastante descriptivo, sobre todo, durante la primera mitad del libro. Creo que es necesario conocer la juventud de Teo para entender donde termina la historia, pero se me hizo un poco larga toda esta parte. En cambio, la segunda mitad es más dinámica, las dosis de misterio se intensifican y descubrir el secreto de Teo se vuelve una necesidad, más que nada por que llega un momento en que empiezas a teorizar lo que está pasando y quieres saber si tus sospechas son ciertas.
Algo que no me ha convencido nada es el instalove de Teo y Santiago; no me parece real. No obstante, diré que me gusta su historia de amor, su amor prohibido y todo lo que conlleva enamorarse en tiempos pasados y más de alguien de otra condición social, pero eso no me hace olvidar ese momento de verse y amor eterno.
Sobre el personaje de Teo, en general me ha gustado, creo que la llegamos a conocer bastante bien, aunque no entiendo muy bien sus decisiones, sobre todo, las que toma de adulta. Me da la impresión de que llega un momento en que toma una decisión importante y a pesar de que las circunstancias cambian y sería factible replantearse muchas cosas; ella sigue firme y a consecuencia de ello renuncia a muchas cosas. En mi opinión renuncia un poco a la felicidad por miedo a volver a sufrir.
Me he quedado con ganas de conocer un poco más a Ona, no llegamos a saber mucho de ella, la autora nos cuenta un par de detalles de su vida y que la empuja a acompañar a su abuela en este viaje, pero me da la impresión de que no termina de cerrar esas tramas. Ona queda eclipsada por la historia de Teo; al final esta es la historia de su abuela y ella simplemente le da un empujón para revivir el pasado y quedar en paz con él. Eso si, la relación que tiene ellas dos es muy bonita y especial; ojalá todas las abuelas y nietas tuvieran una relación como la suya, ese respeto mutuo y ese querer lo mejor la una por la otra.
Esta es la primera novela que ve la luz de Mònica Linares y a pesar de algunos detalles es un buen debut. La historia está bien pensada, la estructura es correcta y tiene ese punto de misterio que te incita a seguir leyendo. Además, durante el último tercio descubrimos varios secretos que no son del todo inesperados, pero que te sorprenden igualmente.
¿Qué vi en sus ojos? Es la historia de Teo, es la historia de su primer amor, es la historia de como le rompieron el corazón y a consecuencia de ello lo esconde en una caja hasta que sin querer su nieta Ona le hace revivir todo su pasado. Si os gustas las historias de familias esta es vuestra historia.
¿Os llama la atención?
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